IMPRESOS: El poder oculto en la era digital
Por Carlos Limón. Líder de Producción de Grupo Tolko
Vivimos en un mundo donde todo parece digital, pero los medios impresos siguen más vivos que nunca. Aunque las pantallas dominan nuestro día a día, los impresos continúan siendo una herramienta esencial tanto para la comunicación interna de las empresas como para conectar con clientes y el público en general. No han desaparecido, solo se han adaptado, aportando un valor único que las plataformas digitales no pueden igualar.

Dentro de una empresa, los impresos son una manera efectiva de mantener a todos en la misma sintonía y de reforzar la cultura corporativa. Por ejemplo, un boletín en la sala de descanso con información importante, carteles llamativos que refuercen la identidad de la empresa o un reconocimiento físico para un empleado destacado generan un impacto emocional que un correo electrónico difícilmente logra. Estos elementos tangibles crean una conexión más profunda y duradera con los empleados.
En espacios como fábricas o almacenes, donde no todos tienen acceso constante a una computadora, los impresos siguen siendo esenciales. Los carteles y anuncios impresos aseguran que la información llegue a todos, independientemente de su acceso a dispositivos digitales. Además, los manuales de operación y las guías de seguridad en formato impreso son indispensables para mantener un entorno laboral seguro y eficiente.
Para clientes y estrategias de promoción, los impresos siguen siendo una herramienta poderosa. Un folleto bien diseñado, una tarjeta de presentación atractiva o un catálogo que se pueda hojear sin depender de una pantalla dejan una impresión más duradera. A diferencia de un anuncio digital que desaparece con un clic, un impreso se mantiene en el escritorio, en la cartera o en casa, recordándole constantemente a las personas que tu marca está presente. Por ejemplo, un catálogo de productos bien elaborado puede ser un recurso valioso para los clientes a la hora de tomar decisiones de compra.
En eventos, exposiciones y ferias, los impresos siguen marcando la diferencia. Son el primer contacto físico con el público y una oportunidad para dejar una huella memorable. Un stand bien diseñado con folletos informativos y tarjetas de presentación atractivas puede captar la atención y generar interés. Si además se combinan con un diseño atractivo y materiales de calidad, su impacto es aún mayor.
La preocupación por el medio ambiente es legítima, pero la industria gráfica ha avanzado mucho en este aspecto. Actualmente, existen tintas ecológicas, papeles reciclados y procesos más eficientes que reducen el impacto ambiental. La impresión bajo demanda también permite minimizar el desperdicio, haciendo que los impresos sean más sostenibles y responsables. Empresas como Grupo Tolko están adoptando estas prácticas para asegurar que sus materiales impresos sean tanto efectivos como ecológicos.
No se trata de elegir entre lo digital o lo impreso, sino de aprovechar lo mejor de ambos mundos. En un entorno saturado de información digital, los impresos destacan porque ofrecen algo tangible que se puede tocar, conservar y recordar. Siguen siendo efectivos, siguen funcionando y, sobre todo, siguen conectando con las personas de una manera única. Así que la próxima vez que pienses que todo es digital, recuerda que un buen impreso puede marcar la diferencia.