El poder del femvertising en el mes de la mujer
La publicidad es un reflejo histórico de los valores y normas sociales que existen, y durante mucho tiempo la representación femenina se ha visto relegada a estereotipos. En los últimos años han surgido campañas que buscan una transformación significativa en la forma en que se representa a las mujeres en los anuncios.
Un ejemplo de lo anterior es la campaña Real Beauty de la marca Dove, lanzada en 2004, que se ha renovado a lo largo de los años. Su objetivo ha sido mostrar la belleza real y que más mujeres se sientan representadas en la publicidad y con ello, lograron aumentar las ventas de la marca, pasando de los US$2.5 millardos a los US$4 millardos.
Como este ejemplo, existen otros, de marcas comprometidas con representar cuerpos y bellezas de mujeres más cercanos a la realidad, tales como Nike o The Body Shop. La pregunta que surge ahora es ¿En dónde queda la representación de las mujeres en puestos de liderazgo?
Según la Universidad Oberta de Catalunya, las mujeres aparecen en el 75% de la publicidad, pero solo en el 6% son mostradas en posiciones de liderazgo, y cuando aparecen ambos sexos, los hombres tienen un 38% más de probabilidades de tener una posición más destacada.
Pero no solo se trata de números de representación, opinó Dinorah Rosado, directora de Recursos Humanos en Cheil México, pues la publicidad es un reflejo de la realidad. En México, sólo 36% de los puestos de alta dirección los ocupaban mujeres en 2024.
“Estas representaciones sesgadas han impactado la percepción de las mujeres, encasillándolas en roles predefinidos. Por ello, es importante crear campañas que conecten con las consumidoras, a través de representaciones con las que realmente se sientan identificadas.”, comentó Rosado.
Esto no solo modifica la percepción social del liderazgo femenino, sino que también influye en la forma en la que se comportan tecnologías emergentes como Chat GPT o Gemini.
Un informe de la UNESCO, señaló que los sistemas de IA, al basarse en datos históricos, pueden replicar la exclusión de las mujeres en puestos de liderazgo y poder. En el campo de la medicina, según algunas herramientas de Inteligencia Artificial, casi todas las enfermeras son mujeres.
Además, un estudio de la Universidad Flinders de Australia, en el que se les pidió a los algoritmos de IA que contaran historias sobre médicos, cirujanos y enfermeros, arrojó que los modelos identificaron al 98% de los enfermeros como mujeres, replicando estereotipos y sesgando a las mujeres a jugar roles definidos.
Con la llegada del mes de marzo, las marcas han encontrado una oportunidad para lanzar mensajes de empoderamiento femenino, promoviendo una imagen de fortaleza, diversidad e independencia, y a esto se le ha nombrado como femvertising.
Los expertos del marketing han encontrado en esta estrategia, una oportunidad para empoderar a las mujeres a través de representaciones más auténticas y diversas, conectando con sus consumidoras y desafiando estereotipos. Hoy en día, las audiencias son mucho más exigentes y están dispuestas a cuestionar las narrativas impuestas por las marcas, que de no hacer match con sus valores y forma de pensar, no dudarán en desconectarse completamente de ellas.
En este sentido, la publicidad se encuentra en una encrucijada: continuar replicando estereotipos o convertirse en un catalizador para el cambio social. La respuesta no reside únicamente en las manos de los creativos y las marcas, sino también en la voz colectiva de consumidores que exigen autenticidad y representación equitativa.
El verdadero poder del femvertising no radica en la mera comercialización de la igualdad, sino en su capacidad para inspirar un cambio significativo. Solo así, la publicidad se convertirá en una herramienta para construir un futuro donde el liderazgo femenino sea lo común y no la excepción.
