¿Cómo afecta la limpieza a la calidad del sueño?

Por Javier Altamirano, director de marca de Alba

 

Es común que a veces despertemos agotados y con la sensación de que no hemos dormido lo suficiente. Aunque existen muchos factores que intervienen en la conciliación del sueño, la higiene en la recámara es determinante para lograr un descanso óptimo.

Javier Altamirano
Javier Altamirando. Foto: cortesía

 

Y es que tan sólo la ropa de cama suele ser la gran olvidada al momento de realizar el mantenimiento y aseo de la casa. Algunas personas llegan a pasar más de un mes sin cambiar sus sábanas. 

 

Pero ¿cómo saber si debemos incrementar la higiene al dormir? Existen algunos síntomas que pueden ayudar a detectar si se está teniendo o no una adecuada rutina de limpieza en la recámara. Entre ellos destacan los estornudos constantes, obstrucción nasal, irritación ocular o incluso enrojecimiento de la piel.

 

Aunque no lo parezca, los colchones acumulan alérgenos, virus y bacterias. Un colchón en uso regular debería limpiarse a profundidad cada 6 meses, y de hecho uno de largo uso pueden albergar ¡hasta 10 millones de ácaros!

 

Esto es de suma importancia, ya que la suciedad no solo provoca alergias, sino además interfiere en nuestro estado de ánimo, e incluso afecta nuestra piel haciéndola lucir opaca cuando no descansamos las horas recomendadas.

 

Recordemos que la recámara, es más que un simple lugar: es el templo de nuestro descanso. Por ende hay que acondicionarla para que podamos sentirnos cómodos, relajados y lograr el anhelado descanso. Te comparto estos tips para que puedas lograr un descanso realmente higiénico y reparador:

 

  1. Lava la ropa con frecuencia

 

Lo ideal es que se cambie la ropa de cama cada semana o al menos dos veces al mes. Esto evita la acumulación de partículas como polvo, ácaros y hongos. Además, incrementa la sensación de confort tan necesaria para conciliar el sueño.

 

2.         Abre las ventanas

 

Otra recomendación infalible para lograr una correcta higiene al dormir es mantener la habitación ventilada. Cuando el aire se renueva es difícil que el polvo de concentre en la cama o en los muebles por lo que debes recordar ventilar tu recámara diariamente.

 

3.         No olvides limpiar el colchón para un descanso óptimo

 

Como decíamos, la limpieza del colchón suele dejarse en un segundo plano y en el peor de los casos se olvida por completo. Existen muchas formas de asear el colchón, pero lo realmente eficaz es un servicio de limpieza profunda de colchones que deshaga las manchas y olores en seco; en Alba, por ejemplo, los métodos de tratamiento van más allá del aspirado e incluyen tanto la esterilización UV cómo la aplicación de un inhibidor anti ácaros.

 

Ahora sí, ¡a descansar se ha dicho!