¿Funciona el Marketing Tecnológico?
Por Fernando Moyao, Grouper y especialista en Crisis Management en PRP
La integración de las nuevas tecnologías en el mundo del marketing dejó de ser una tendencia y es hoy indispensable para mejorar la experiencia de los clientes, la optimización de productos y servicios, así como el impulso de las ventas, por lo que el Marketing Tecnológico o MarTech, cobra importancia estratégica para competir en el entorno actual.
De manera general, el Marketing Tecnológico o MarTech es la integración de un grupo de tecnologías digitales que amplían las capacidades de dicha área y acompañan al cliente a través de su journey, desde la búsqueda de información hasta la generación de programas de lealtad y más allá.
Entre sus mayores beneficios está su capacidad para ofrecer experiencias personalizadas a gran escala. Gracias a herramientas como la inteligencia artificial (IA), el análisis de datos o la automatización, las empresas pueden conocer a sus clientes de manera más profunda, así como ofrecerles contenido y productos que se ajusten a sus necesidades y preferencias específicas.
Un claro ejemplo de esto es la personalización de las recomendaciones de productos en plataformas como Mercado Libre. Con el uso de IA la marca, hace posible predecir las ventas de cada artículo con lo que logran optimizar el almacenamiento en los centros de distribución con una mejor gestión de inventarios. La eficiencia operativa que se logra a través del uso de la tecnología se traduce en una mejor experiencia para el usuario lo que aumenta las probabilidades de conversión de una transacción.
El MarTech también influye directamente en los productos y servicios que una empresa ofrece. Las herramientas de análisis de datos permiten a las marcas entender mejor las necesidades del mercado y adaptar su oferta de manera más efectiva.
Un ejemplo es Nike que con el uso de la tecnología transformó la experiencia del usuario a través de la cocreación de sus propias zapatillas: la aplicación Nike By You en EEUU, permite a los consumidores diseñar su propio calzado al poder elegir colores, materiales y características. Este nivel de personalización, habilitado por la tecnología, no solo mejora la satisfacción del cliente, sino que también fomenta la lealtad y el vínculo emocional con la marca.
Finalmente, una estrategia de marketing tecnológico impacta de forma directa en las ventas. Las herramientas de análisis de datos permiten a las empresas identificar patrones de comportamiento y segmentar sus audiencias de manera más precisa. Así mismo la automatización del envío de correos electrónicos personalizados, recordatorios de carrito abandonado y promociones específicas para cada segmento del público ayudan a ahorrar tiempo y recursos, por lo que este tipo de herramientas incrementan la tasa de conversión.
Las empresas de comercio electrónico son un claro ejemplo de esto, muchas de ellas utilizan tecnología avanzada de análisis de datos para mostrar anuncios y promociones personalizadas, lo que se traduce en un aumento de las ventas. Estas plataformas también emplean técnicas de marketing predictivo que, basadas en el análisis del comportamiento del consumidor, sugieren productos adicionales o complementarios, lo que puede incrementar el monto del ticket promedio.
Los beneficios del marketing tecnológico son claros: mejora la experiencia del cliente, optimiza los productos y servicios, y genera un incremento en las ventas. Por esta razón, es indispensable que las empresas desarrollen estrategias que aprovechen al máximo todas las herramientas tecnológicas disponibles. Aquellas que logren integrar la tecnología de manera efectiva en su estrategia de marketing no solo estarán en mejores condiciones de competir, sino que podrán ofrecer un valor real a sus clientes y, por ende, generar un mayor crecimiento en sus resultados de negocio.
