Tesa encamina sus estrategias para una neutralidad climática en 2050

Por Bibiana Tellex

Anuncia que el 100% de la electricidad de sus plantas proviene de energías renovables y reduce sus emisiones de COV un 92% por tonelada de producto final producido.

La empresa de soluciones autoadhesivas, tesa, presenta sus nuevas iniciativas que priorizan la protección del clima, recursos y medio ambiente a través de la reducción de su huella ecológica a lo largo de toda la cadena de valor.

Para la consecución de una neutralidad climática para 2025, la marca alemana ha puesto en marcha diversas medidas como la obtención de electricidad a través de energías renovables. Al final del año pasado, el 100% de la electricidad consumida en sus plantas del mundo provino de energías renovables y tesa trabaja para que sus oficinas logren lo mismo.

Según el informe United in Science 2021, la concentración de gases de efecto invernadero, el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O) han seguido aumentando durante el primer semestre de este año. La temperatura media anual del planeta durante el periodo 2017-2021 está en su nivel más alto desde el periodo pre-industrial.

“Esta crisis climática que se está viviendo hoy en día es uno de los mayores retos que el mundo está enfrentando, comentó Carlos Blanco Tarcena, director general de Tesa México. “Por esta razón, en tesa nos hemos comprometido a contribuir a que la temperatura media global no aumente más de 1.5°C. Realizamos esfuerzos corporativos por reducir nuestras emisiones de CO2 hasta en 30% para el 2025 (con respecto a 2018), para alcanzar una neutralidad climática hacia 2050.”

Además, para limitar su impacto sobre el medio ambiente, tesa implementó una reducción de su consumo energético y, en su sede central, estableció un sistema de gestión energética certificado por la norma ISO 50001. Esta norma permite optimizar los procesos con un gran consumo e identificar las áreas con potencial para ahorrar más energía.

En sus plantas de producción cuentan con sus propias unidades de cogeneración, lo que les permite producir calor y electricidad en sus instalaciones de forma óptima para el medio ambiente. La crisis climática no es el único reto. Otro importante problema es el aumento de los desechos.

Por ello, el objetivo de tesa es reutilizar o reciclar recursos cuando sea posible y evitar residuos desde fases iniciales. Para su reducción, ha empezado por envases, usando recipientes reutilizables o reciclables y materiales de envasado procedentes de fuentes sustentables. Disminuyendo el peso de los envases también bajan las emisiones de CO2 causadas por el transporte. Según el Diagnóstico Básico para la Gestión Integral de los Residuos, elaborado por la SEMARNAT, una persona al día genera 944 gramos de residuos, mientras que la cifra total del país asciende a 120 mil 128 toneladas.

Carlos Blanco puntualizó que además de las emisiones de CO2, también la empresa trabaja en otras acciones amigables con el medio ambiente que impacten la cadena de producción. Esto incluye las emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV), que son nocivos tanto para el medio ambiente como para la salud humana y que se producen al usar disolventes. “Nuestro  objetivo es evitar las emisiones de COV y ampliar nuestra gama de tecnologías sin solventes,” dijo Carlos Blanco. “En este campo entre 2001 y 2019, hemos reducido nuestras emisiones de COV un 92% por tonelada de producto final producido.”