Planificación estratégica: El secreto japonés
Por Alberto Diaz Duarte, consultor empresarial
Después de fundar públicamente tres Start-Up y emprender una docena de negocios tradicionales, he tenido la oportunidad de trabajar con varias compañías, entre ellas; japonesas.
El éxito de este tipo de compañías podría decirse que es resultado de espléndidas estrategias. Año tras año se las arreglan para incrementar su participacion en el mercado y para crear riqueza.
¿Cómo lo logran?
Tienen un estratega de gran talento natural que es, por lo general, el fundador o director general, su enfoque es crecer las ventas.
Como ya habrás podido adivinar, mi mensaje en este artículo es que las estrategias de negocios que llegan a tener éxito no provienen de un análisis riguroso, sino más bien de un particular estado mental.
Es lo que yo llamo la mente del vendedor, la percepción y el poderoso enfoque de cumplir la semanal, quincenal, mensual o trimestral. A menudo esto se puede resumir en un sentido de misión, de entregarle un producto o servicio a un cliente que necesita resolver un problema.
Alimentar una mentalidad creativa e intuitiva tiene mejores resultados que una racional. Las grandes estrategias comerciales, al igual que las grandes obras de arte o los grandes descubrimientos científicos, exigen gran maestría técnica en su elaboración, pero originan ideas fuera del ámbito del análisis consciente.
Si realizamos a partir de nuestras ideas, la elaboración de un modelo de negocios, estaremos soñando con la construcción de una empresa rentable.
Considero que nada tiene que ver la suerte y que todo es cuestión de actitud y método. Para resolver un problema es vital, desde el principio, que éste se formule de manera que facilite el descubriendo de una solución.
Ejercicio para descubrir una problemática real
Supongamos, que por ejemplo, que las horas extras se han vuelto un problema crónico en una compañía y están absorbiendo los beneficios. Si se plantea la pregunta: ¿Qué debería hacerse para reducir las horas extras?
Varias contestaciones surgirán por si solas:
Trabajar con más ahínco durante las horas del horario establecido.
Reducir el tiempo de la comida y las interrupciones para el café
Prohibir las conversaciones telefónicas privadas largas.
O podríamos pensar en las personas primero y planteando la siguiente pregunta:
¿Es la plantilla de trabajadores de esta compañía lo suficiente grande como para hacer frente al trabajo que se le exige?
¿Las capacidades de los empleados están a la altura de la naturaleza del trabajo?
La clave en la etapa de resolver un problema, viene hacer la búsqueda en la practica del problema, vivirlo la mayoría de las veces ayuda a comprenderse antes de proponer cualquier solución real.
Los vendedores más experimentados saben que la tecnología no resuelve nada por si misma, solo ayuda a llevar la solución a más personas. ¿Qué opinas de esta forma de pensar?
Alberto Diaz Duarte
Linkedin: https://www.linkedin.com/in/albedidu/
