Tratamientos innovadores, esperanza de pacientes con VIH
El 1/XII/2017 se conmemora el día nacional del VIH/SIDA. A la fecha más de 30 millones de personas en el mundo viven con VIH siendo la población joven, en edad productiva, la más afectada.
De acuerdo con el Centro Nacional para la prevención y el control del VIH y SIDA (CENSIDA), desde el primer brote registrado en 1983, hasta lo que va del año, se han reportado más de 190,000 casos de SIDA en México.
Cuando el virus infecta a una persona generalmente los síntomas son muy escasos, incluso inexistentes. Es hasta meses e incluso años después de que se infectó, que el paciente acude por atención médica.
Por ello se recomienda la prevención y realizarse pruebas de detección de manera rutinaria.
El problema no decrece ya que : “los jóvenes no consideran las pruebas de detección dentro de sus evaluaciones médicas de rutina y, aun cuando se les ofrecen, las rechazan pues no se consideran en riesgo”, dice el Dr. Marco Banda, gerente de Asuntos Médicos en GlaxoSmithKline (GSK).
Menciona que aún cuando no existe una cura para el VIH, existen tratamientos antirretrovirales que disminuyen la progresión de la enfermedad, mejoran a calidad de vida del paciente y disminuyen el riesgo de contagio.
“Hoy en día contamos con terapias que permiten al paciente tener una esperanza de vida muy similar a la que tenía antes de adquirir el virus”, menciona Banda.
En cuanto a los avances científicos entorno al tratamiento de la enfermedad, el especialista comparte que queda mucho camino por recorrer en el campo de la inmunología y en el tratamiento de esta grave enfermedad; advierte que las acciones de la compañía están enfocadas a generar un impacto positivo en las personas con VIH para que puedan disfrutar de una mejor calidad de vida, por más tiempo”.
Por su parte, el psicólogo Andrés Costilla, presidente de la Asociación Amigos Potosinos en Lucha Contra el SIDA, A.C., menciona que el reto más importante en la sociedad es reducir el estigma y la discriminación que por más de 30 años enfrentan los pacientes que viven con VIH, tanto en los servicios de salud, su trabajo como su núcleo familiar.
