El segmento D+, un consumidor emergente y poderoso
Por Adrián Perez Cuadra, académico de la Facultad de Empresariales de la Universidad Panamericana
En un país como México, ha sucedido un fenómeno social y económico muy interesante en la última década. El gran empoderamiento del consumidor D+, un consumidor ávido de satisfacer necesidades de bienestar y estilo de vida que lo llevan a ser, sin duda, uno de los grupos sociales más pujantes de esa gran clase media que hoy es tan extensa.
¿D+ clase media?
Diversos estudios y radiografías de nuestro entorno sociocultural, han demostrado el gran valor que tiene hoy esa gran clase media – hacia abajo y hacia arriba – que es la que sostiene además la gran pirámide poblacional. Y nadie se quiere queda afuera de la gran clase media. Todos en algún momento desean estar. Ya sea de una u otra forma.
La apuesta por capturar el mercado de la clase media desde la perspectiva del consumo masivo, es sin duda pensar en ese estilo de vida como la gran estrategia de segmentación. Pensar que los ingresos son aquellos que determinan como se vive, ha quedado en la memoria de la teoría de la mercadotecnia. Es poderosa, está más presente que nunca, quiere todo y hace lo que tenga que hacer por obtenerlo. Les presento a la célula D+.
El nuevo integrante de la clase media. Sin duda con mucho por querer y mucho por hacer, representa un porcentaje interesante de la configuración social. De acuerdo al reporte de Niveles Socioeconómicos de la AMAI en 2020, tan solo en la Ciudad de México el 16% de la población pertenece a este segmento. Muchos millones de mexicanos conforman la nueva familia D+.
¿Cuál es la importancia de este segmento?
Que las marcas y las empresas enfocadas en la masividad, por mucho tiempo se concentraron en ese gran C y C+ como los niveles socioeconómicos dignos de inversiones en posicionamiento. Hoy la fórmula no cambió, simplemente es más amplia. El cuestionamiento viene de inmediato. ¿Qué pasa hoy con nuestra celular D+? Es cuestión cualitativa, es cuestión de disfrutar todo lo que hay alrededor. El estilo de vida que cualquier ser social busca, justamente lo tiene bien identificado este sector. Participar de la tecnología, claramente es una muestra de cómo estar conectados es prioridad. El disfrutar de esos pequeños placeres que conectan con una vida más eficiente, esa es la clave.
Y qué decir en un país donde también hay diferentes compañías que lo tienen claro hace muchos años. Pensemos de inmediato en marcas como Elektra, Coppel y otros jugadores que desde los formatos tradicionales de comunicación masiva como la televisión, han establecido su oferta de valor para ese target estrella.
Pero también han llegado las plataformas digitales donde la clase media ha podido encontrar respuesta a esas necesidades de completar y lograr el tan anhelado estilo de vida. La fórmula ha ido robusteciéndose con marcas como Amazon, Mercado Libre, Shein, Linio y otras que atienden bien a ese gran C y C+ que busca comodidades y una vida más conectada.
Pero la historia no acaba ahí. En el 2019 nace una marca de E-Commerce que presenta su oferta de valor y diferenciación para el gran segmento D+. Gangabox, una compañía que en dos años ha entendido el nombre del juego en una industria competida y donde sabe la importancia de no dejar fuera de la jugada a esta célula social. La estrategia de Gangabox es la diferenciación en low price, catálogo y delivery. Sin necesidad de una tarjeta de crédito, sus consumidores acceden a recibir los productos que compren en la puerta de su casa. Acercándose a esa clase media tan extensa y con toda razón, empoderada.
