La era digital y el efecto post-pandémico en la salud visual de los Mexicanos
Se estima que para el año 2025, se prevé que el 90% de los mexicanos padezcan algún tipo de problema visual y que el 70% de los casos estén relacionados con miopía y astigmatismo a causa del exceso de uso de aparatos electrónicos.
En la actualidad, la era digital está repercutiendo de manera negativa a la población en términos de salud visual, generando una nueva pandemia que es poco atendida y concientizada.
Bajo este tenor, entrevistamos a Nelson L. Merchan, director de Relaciones Profesionales de EssilorLuxottica México, sobre esta problemática.
“Después de la etapa crítica de la pandemia en el mundo entero empezó a cobrar importancia el incremento de población infantil y adolescente con miopía, debido a los nuevos hábitos visuales dependientes en extremo de la visión cercana. Sin embargo el astigmatismo, ya sea miópico o hipermetrópico, siguen siendo al igual que la miopía , los defectos visuales de mayor prevalencia en la población. En México, según estudios publicados, la prevalencia de astigmatismo y miopía, representan entre el 25% y 30% respectivamente”, dijo el vocero de Essilor.
Además del astigmatismo y la miopia, hay otros problemas visuales que se están presentando con más incidencia en los usuarios de los dispositivos móviles,
“Es muy común hoy día, encontrar a población infantil y adolescente con problemas de enfoque en visión próxima, más miopías progresivas y algunos síndromes de comportamiento visual, tales como: el visual digital, que consiste en una serie de signos y síntomas asociados al trabajo exagerado en tiempo y distancia de las pantallas digitales, ya sean celulares, ipads, computadores y televisores”, compartió el entrevistado.
“Pero a la vez, en edades próximas a los 35 años, se están presentando aparentes problemas de enfoque y acomodación en visión próxima, que alarman sobre una posible pre presbicia, y es población que por lo general es laboralmente activa y que están sufriendo de astenopias complicadas, acompañadas de fuerte stress y cansancio físico general. Cabe mencionar que es importante tener en cuenta que absolutamente todos los seres humanos en una edad promedio de 40 años, comenzamos a sufrir de presbicia o pérdida de la amplitud de enfoque en visión próxima y necesitamos usar corrección óptica positiva para suplir las demandas visuales de cerca”, informó.
Herencia de problemas visuales
Si bien se recomienda visitar al oftalmólogo u optometrista una o dos veces al año para supervisión, ¿cuáles podrían ser los signos en la visión, que pueden llegarse a presentar y que son indicadores de alerta?
“Lo primero que hay que analizar en cualquier ser humano es el factor de herencia de problemas visuales y defectos refractivos. Si papá o mamá o los dos utilizan corrección visual, ya es una primera alerta. La mayoría de los defectos de la visión son hereditarios. Segundo es importante reconocer que signos como el arrugar los ojos, fruncir el ceño, acercar los textos o sentirse afectados por la luz, son indicadores de alerta, y tercero y no menos importante, es que cualquier dolor de cabeza (cefalea), podría estar fuertemente asociado a un problema visual no corregido. Y habría que consultar de forma inmediata a un especialista de la visión”, advierte el especialista.
“Ahora bien, si la persona ya está usando corrección visual, una condición importante para que sepa que está siendo bien corregido y cuidado la salud de su visión y de sus ojos, es que observe frecuentemente la transparencia de los lentes oftálmicos en uso; porque si estos se encuentran rayados, grasos, sucios, empañados, evidentemente hay que cambiarlos de manera inmediata”, añadió.
Higiene Visual, disonante con la realidad laboral
El especialista señaló que las recomendaciones de higiene visual son disonantes con la realidad laboral y de estilos de vida actuales, pero se busca que su uso sea mediado por espacios de descanso en que se relaje la visión a distancia; y que las evaluaciones de la vista con un especialista son cada vez más frecuentes. Signos y síntomas de estrés visual y ocular son alarmas para atender de forma prioritaria. Por lo menos los anteojos de prescripción deberían tener protección a la radiación ultravioleta nociva. Sin embargo en niños se pide que esta dependencia sea regulada a por lo menos, no más de 1h 30 min por día. Sobre todo por la distancia más corta que hay entre el dispositivo y los ojos del niño, informó.
Considerar normas ergonómicas y protección a la luz nociva a los ojos
Asimismo, el entrevistado dió a conocer que es importante tener en cuenta las normas ergonómicas generales acordes a cada puesto de trabajo. Últimamente la informalidad ha traído que de cualquier manera se pueda trabajar cómodamente, pero la ergonomía visual es importante, postura correcta, posición de la cabeza, ubicación de los brazos, posición de las piernas, espalda erguida, buena iluminación, ventilación del lugar, son criterios a evaluar en cada persona frente a un dispositivo digital en uso, y más si se hace por periodos prolongados.
Respecto a la forma en que se debe tomar y ver el teléfono móvil o la tablet, para no cansar o afectar más los ojos, el entrevistado indicó que el primer consejo es hacerlo siempre con lentes que tengan protección a la luz nociva a la visión y los ojos, segundo, que el paciente esté totalmente corregido en su defecto visual para no exponer al ojo a sobre esfuerzo; y tercero regular la intensidad de la luz del dispositivo.
Visitas al oftalmólogo
También le preguntamos: ¿A partir de qué edad es preferible llevar a los niños para visitar al oftalmólogo a revisión?:
“Cada niño es diferente, y de acuerdo a los factores de riesgo de su vida individual es importante. Pero como regla general a un niño debería llevarse a examen visual mínimo dos veces al año, por lo menos mientras está en pleno desarrollo y emetropización, o normalización de su estado visual. Esto sucede en todos los niños antes de los ocho años de edad”, compartió el entrevistado.
Respecto a los adolescentes, destacó que las visitas frecuentes al profesional de la visión deben buscar su adherencia a los tratamientos ópticos de corrección visual y a revisar permanentemente el estado y calidad de transparencia de sus lentes oftálmicos y de paso revisión del ajuste adecuado de los armazones. “La regla estándar dice que la visita de control visual es obligatoria por lo menos una vez al año”.
Recomendaciones a los adultos mayores
Por último, nos informó: “El adulto mayor demanda de mayor calidad de visión y de protección de la salud ocular, por tanto la cantidad de valores agregados que deben acompañar a sus lentes de corrección óptica son más que imprescindibles. Lentes con garantías de excelente transparencia, enfoque en diferentes distancia, para relajar la visión, protección ultravioleta nociva, evitar lentes rayados, engrasados, sucios, y a la vez, reflejos a las luces externas, son vitales para asegurar la comodidad visual y la calidad de vida visual”.