El deporte olímpico de inventar pretextos para faltar al trabajo

Los empleadores deben ser cada vez más cautos al justificar una falta a un trabajador y deben asegurarse de que la autoridad ha sido quien ha revisado la situación médica del empleado y ordenado su reposo o aislamiento.


El deporte olímpico de inventar pretextos para faltar al trabajo
Imagen: Emma Dau para Unplash

Estefanía Rueda, socia de Littler,  despacho especializado en asuntos laborales, recomienda algunas acciones para que las empresas confirmen la veracidad de las incapacidades que reciben y nos recuerda sobre las consecuencias graves de una “mentira piadosa”.

 

Muchos hemos escuchado casos, en que, por el mal manejo de sus redes sociales, o por la mala suerte de aparecer en la transmisión en vivo de un evento deportivo, los compañeros de trabajo e incluso los patrones, se dan cuenta de que sus empleadas o empleados mintieron al utilizar justificaciones de incapacidad falsas. Acontecimientos como los Juegos Olímpicos de París 2024, se convierten en los escenarios ideales para que estas situaciones sucedan. 

 

El mal uso de herramientas tecnológicas y aplicaciones, han impulsado la creación de incapacidades falsas de manera rápida y sencilla. En este contexto, el IMSS ha alertado a las empresas sobre las incapacidades médicas que son solicitadas, aunque no se requieran, o las que son solicitadas por meses cuando en realidad solo ocupan días o semanas; realizándose así el delito de defraudación fiscal a la institución.

 

La Ley Federal del Trabajo establece, el que más allá de que el trabajador cometa una falta de honradez, el patrón le puede sancionar o hacerle un llamado disciplinario; se le termine su contrato por haber falsificado documentos o por entregar información falsa; y en casos más extremos, iniciar un proceso penal que puede terminar en una pena de 4 a 8 años de prisión y una multa de 200 a 360 días de salario mínimo. 


El deporte olímpico de inventar pretextos para faltar al trabajo
Imagen de Bradem Collum para Unplash

La socia de Littler, comparte las siguientes recomendaciones que un empleador puede realizar para evidenciar la validez de un certificado de incapacidad:

 

-Verificaciones con el IMSS: los patrones, a través de la plataforma en línea, escritorio virtual, tienen la capacidad de verificar con el IMSS, si dicha incapacidad está en sistema y si es verdadera. 

-Confirmación de la cédula del médico: se puede verificar en línea la cédula profesional del médico tratante que aparece en la incapacidad, en la página del registro nacional de profesionistas y ver si el número de cédula corresponde con el nombre del doctor y la especialidad a la que ha sido canalizado el trabajador.

-Evidenciar la emisión de la incapacidad por el médico: solicitar por escrito a la unidad médico familiar que emitió esta incapacidad, el que confirme si emitió ésta o no, y de esta manera tener el sustento de prueba para una medida disciplinaria o una posible rescisión. De aquí la importancia de  siempre solicitar documentos comprobatorios.

-Ir más allá de lo jurídico: es importante no dejar de lado la construcción de una relación transparente y humana entre los empleadores y sus empleados, que otorgue flexibilidad y confianza mutua para atender casos personales complicados, o simplemente para negociar o anticipar el uso de vacaciones.  

 

Antes de utilizar la ya famosa muerte de un familiar o una enfermedad para ausentarte de tus labores profesionales, piensa bien sobre sus implicaciones. Si tienes preguntas sobre cómo manejar un mejor control de asistencia que reduzca el ausentismo en el trabajo y las malas prácticas por parte de trabajadores, visita https://www.littler.com/es/location-global/mexico y conoce los diversos servicios que ofrece Littler en materia laboral.

 

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Revista NEO 297

 


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