Nuevos retos en la alta dirección de empresas
BSI Group México ha iniciado una serie de actividades informativas enfocadas a invitar a las empresas mexicanas de cualquier tamaño a actualizar sus Sistemas de Gestión de Calidad (SGC), bajo la nueva versión ISO 9001:2015 que, entre sus más importantes innovaciones incluye un marcado nivel de compromiso de la Alta Dirección.
Una de las características más importates que destaca la nueva versión ISO 9001:2015 es, sin duda, la participación de los directivos de la empresa para eficacia del sistema de gestión de calidad.
Entre las principales líneas de acción destacan: la resposabilidad y obligación de rendir cuentas en torno a las acciones tomadas en el SGC; involucra en el establecimiento de políticas de calidad, así como en los objetivos que el sistema requiere de acuerdo a la dirección estratégica.
Los procesos se dan a conocer de manera lineal, con recursos disponibles que la propia dirección designa, asegurándose que el sistema de gestión de la calidad logre los resultados previstos.
“Definitivamente, ISO 9001 en su versión 2015, es un parte aguas para la gestión de las empresas, con el fin de ser más eficientes, mantenerse en tiempos difíciles y seguir prosperando. El nuevo enfoque de la norma, en la cual alinea sus procesos de gestión a los objetivos estratégicos de la empresa, el tener una cultura de gestión de riesgo para operar; hace indispensable el involucramiento de la alta dirección”, mencionó Eduardo Muñoz, Presidente de BSI México y LATAM.
Demostrar el compromiso con la calidad y asegurar que los objetivos estén establecidos a todos los niveles y funciones es benéfico para las organizaciones. Este énfasis en el liderazgo, sumado a la gestión de riesgos y sustentado en objetivos, medición y transformaciones permanentes, son garantía a partir de menos requerimientos prescriptivos, gracias al Anexo SL, el cual establece un marco común para el Sistema de Gestión de Calidad (SGC).
Para la empresa ya es requisito fundamental identificar todo aquello que incida negativamente en el logro de los objetivos previstos en su sistema de gestión. Sin embargo, además de actuar de manera preventiva, la organización también debe poner atención en el aseguramiento del mercado y las metas de gobierno. La nueva versión cumple con este objetivo y exige dar preponderancia al trabajo que realiza la alta dirección.
