Protección y consentimiento: los dos pilares más importantes en la vida sexual

Por Rodolfo Rodríguez, Sexual Health Manager de Trojan México

Febrero es conocido por su oda al amor, en el calendario se marcan dos fechas importantes: 13 de febrero Día del Condón y, por otra parte, 14 de febrero Día del Amor. El Día del Condón fue propuesto y establecido por la “Fundación para el Cuidado del Sida”, en el año 2012 en más de 31 países, incluido México. Más allá de que haya sido elegida al azar, esta fecha fue planeada con la idea de generar conciencia sobre el uso del preservativo durante el 14 de febrero.

La sexualidad no tiene día en el calendario, cada persona es libre de ejercela como desee, teniendo en cuenta que hay dos aspectos muy importantes: la protección y el consentimiento.

El tema de la protección es algo que ha movido a Trojan desde sus inicios, logrando los condones más seguros del mercado, siendo los únicos que pasan por tres distintos testeos para asegurar la mejor calidad. El primer filtro por el que pasan es aire, los inflan hasta que alcanzan el tamaño de un balón de basketball. El segundo filtro es agua, los llenan con la capacidad de un balón de basketball. Por último, pasan por electricidad. Si el condón no la traspasa, está listo para empaquetarse.

Trojan es el aliado perfecto para vivir tu sexualidad libremente y de manera segura. Una vez que hayas solucionado la parte de la protección, deberás ir por lo segundo más importante, el consentimiento.

El sexo consensuado es cuando las personas que están involucradas acuerdan participar en una actividad sexual de cualquier tipo. El consentimiento debe de expresarse verbalmente y de manera clara por los involucrados. En otras palabras, se debe escuchar claramente un “sí” para continuar, recuerda que tienes control sobre tu cuerpo en todo momento. Cada participante independientemente de su género, puede tomar decisiones, esto es si está arriba o abajo, si desea dar control físico a otra persona, si quiere besos, sexting, sexo oral, contacto genital o penetración. Sin el consentimiento de cualquier persona involucrada en estas actividades es una agresión sexual o violación.

La ausencia de un no, no quiere decir sí. No debemos de asumir que solo porque ya pasamos primera y segunda base con tu pareja, tienes el consentimiento para seguir. “No” significa no en todos los idiomas, debes detenerte inmediatamente y hablar con tu pareja. Las parejas que tienen relaciones sexuales habitualmente o incluso si han estado juntas por mucho tiempo deben de dar su consentimiento. ¿Sí, cada vez? Sí, porque lo que has hecho antes no da consentimiento del ahora. Importante: lo que alguien lleva puesto no tiene nada que ver con el consentimiento, incluso si no lleva nada puesto. La ropa o estar desnudo no da consentimiento. Decir “sí” lo hace.

¿Qué situaciones pueden ser un no?

Cuando alguien está bajo las influencias del alcohol o alguna sustancia, aunque esta persona diga que “sí”, no pueden dar su consentimiento al estar intoxicado. Si la otra persona se desmaya, incluso durante las relaciones sexuales ya no tienes el consentimiento para continuar. En otras palabras, todos los participantes dentro de la actividad sexual deben ser personas que se encuentren 100% conscientes para poder dar su consentimiento.

Nos encontramos en una época en donde este tema ha cobrado relevancia, gracias al nuevo entendimiento que se tiene con respecto a la sexualidad.

En pocas palabras el consentimiento debe ser:

• Específico: las relaciones sexuales o cualquier actividad que implique un involucramiento, requiere de pedir y recibir consentimiento para continuar.
• Libre: si alguien dice que no, es su decisión. No presiones para que continúen. Recuerda que no te debe explicaciones, ni mucho menos preguntes si está seguro. No te enojes, respeta sus tiempos y decisiones.
• Informado: si no estás seguro de algo, asegúrate preguntar para tomar una decisión. No actúes por inercia. Si decides probar algo, eso no significa que la otra persona está obligada a hacer lo mismo, lo que lleva a…
• Continuo: una persona puede, en cualquier momento, por cualquier motivo y sin explicación ni consecuencia algun, retirar el consentimiento. Un sí se puede convertir en un no en cualquier momento.
• Entusiasta: cuando se trata de cualquier acto sexual, debes hacer las cosas que deseas hacer, no lo que se espera que hagas. Nada es tu obligación, todo siempre es una opción.