La verdadera prueba del servicio de atención al cliente de una organización no es cuando las cosas van bien, sino cómo se gestionan cuando no. A medida que el frágil sector de los viajes intenta recuperarse, está fallando mucho en el servicio al cliente. Parte de la culpa es de los aeropuertos y las compañías aéreas, mientras que otros elementos están fuera de su control. Todo ello está afectando al cliente.