Todos somos vendedores

Por Víctor Hernández, Consultor de Negocios

Según cifras del INEGI durante el último cuatrimestre del 2018, más de 56 millones de mexicanos conforman la Población Económicamente Activa (PEA) del país. Esta cifra debe considerarse por todos los que estén en busca de generar un ingreso económico, puesto que tendrán que demostrar por qué eres mejor que la competencia, sin embargo la pregunta aquí es ¿Qué necesito para ser mejor?

Vendedor
Foto: Pixabay

En primer lugar, necesitas conocer qué vendes exactamente, no se trata de vender un auto, se trata de vender la seguridad de tu familia, libertad o un mejor estatus social. Los seres humanos nos movemos a través de emociones capaces de hacernos actuar o detenernos de inmediato, la labor de todo vendedor es indagar con el cliente hasta encontrar las emociones que lo hagan comprar nuestro producto

Para poner esto en contexto, la emoción de estrenar un auto nuevo puede variar de persona en persona. Detente a pensar por un instante en lo siguiente, si de pronto alguien de tu familia te hereda 1 millón de dólares ¿Qué harías con ese dinero? Cada uno de nosotros tendría planes diferentes para un regalo tan oneroso, ya sea pagar deudas, gastarlo, invertirlo o guardarlo; las emociones que nos causa pensar en el uso futuro que le daremos es lo que nos hace decidir.

La necesidad de tener un mejor estatus podría ser el motivo principal para gastarlo todo en lujos, la búsqueda de emprender un negocio nos  hace invertirlo de una forma que creemos más inteligente y el miedo a dejar desamparada a nuestra familia nos haría gastarlo de una forma distinta. La labor del vendedor es encontrar la forma en que el cliente desea gastar su dinero.

Independientemente de tu profesión, tienes que buscar la mejor forma de vender lo que sabes hacer, ya sea cuidar de la salud, brindar servicio al cliente o administrar un negocio. Recuerda que lo barato no es lo mejor, si tu producto tiene un verdadero valor agregado tu mercado meta estará dispuesto a pagar por él siempre y cuando construyas las emociones correctas.