LATAM reduce su tiempo en redes: ¿Cómo las marcas pueden apoyar este cambio en 2025?
Entre los objetivos más destacados, según Statista, se encuentra la reducción del tiempo dedicado a las redes sociales, un mercado que ha adquirido una relevancia primordial en el ámbito publicitario para cientos de marcas y empresas.
De acuerdo con el estudio Marketing Strategy & Media Investment 2024-2025 realizado por la asociación IAB México, se prevé que las inversiones en publicidad digital aumenten a doble dígito, con una especial activación en plataformas como TikTok. Este fenómeno, aunque varía entre países, refleja un creciente deseo de priorizar actividades offline, mejorar la salud mental y disminuir el estrés asociado al consumo excesivo de contenido digital.
Un estudio reciente de Ipsos revela que Brasil lidera esta tendencia, con un 34% de personas planeando desconectarse más de las redes sociales, seguido por Colombia (33%) y Perú (31%). En menor medida, México, Chile y Argentina también muestran interés en esta meta, con porcentajes que oscilan entre el 25% y el 29%.
El agotamiento digital no es una novedad. Según el Digital News Report del Instituto Reuters, el estrés vinculado al uso excesivo de redes sociales ha aumentado considerablemente desde 2019, afectando especialmente a la Generación Z. De hecho, la mitad de esta generación pasa más de cuatro horas diarias en estas plataformas, pero busca alternativas para equilibrar su tiempo.
Steffy Hochstein, Directora Digital en another, una agencia de comunicación estratégica con la mayor oferta de servicios en América Latina y experta en experiencias digitales para marcas, señala que esta situación representa una oportunidad para que las empresas replanteen sus estrategias. “Movimientos como Veganuary o Enero Seco permiten conectar con los consumidores a través de valores compartidos y experiencias fuera del entorno digital”, afirma Hochstein.
Por ejemplo, iniciativas como Veganuary invitan a explorar una alimentación vegana durante el mes de enero, promoviendo la sostenibilidad y la salud. Las marcas pueden participar ofreciendo productos basados en plantas o renovando su portafolio para demostrar su compromiso con estos valores. Por otro lado, Enero Seco propone un reto personal de abstenerse de beber alcohol durante todo el mes, lo que ha llevado a varias marcas a activar sus productos con bajo porcentaje de alcohol.
Hochstein sugiere que las empresas fomenten experiencias en espacios físicos que impulsen el bienestar, tales como talleres de cocina, sesiones de meditación o actividades deportivas. Estas iniciativas pueden alinearse con los propósitos del consumidor, fortaleciendo el vínculo emocional con la marca.
Además, la experta recomienda que la presencia de marca en espacios físicos sea sutil para no saturar a un público que busca reducir sus interacciones digitales. “En las acciones presenciales, es posible crear un entorno de presencia de marca sin necesidad de conexiones excesivamente directas. Este enfoque permite que las marcas sean recordadas no solo por sus productos, sino también por su capacidad de aportar experiencias significativas y positivas a la vida de su público”, añade Hochstein.
Para mantenerse relevantes sin saturar los medios digitales, las empresas pueden explorar medios alternativos como impresos, publicidad en exteriores y eventos locales. Este enfoque promueve una interacción más significativa y genuina con la audiencia.
En lugar de considerar la desconexión digital como un obstáculo, Hochstein la ve como una invitación a innovar en la comunicación. “Conectar con las necesidades reales de las personas y fortalecer su relación con la marca es esencial en este nuevo panorama”, concluye la experta.
Con estas estrategias, las marcas en América Latina tienen la oportunidad de adaptarse a los cambios en los hábitos de consumo digital, promoviendo un equilibrio saludable entre el mundo online y offline en 2025.