Troyano afecta a usuarios Android en Latinoamérica
En 2017, una nueva variante de downloader (códigos capaces de instalar en el equipo otras aplicaciones descargadas de la red) incrementó sus detecciones entre usuarios latinoamericanos hasta posicionarse como la variante más detectada de este tipo de amenaza en la región. Esta amenaza se propaga mediante servidores maliciosos, tiendas no oficiales y sitios de malvertising, haciéndose pasar por falsas soluciones móviles de seguridad, reproductores de música y videos, actualizaciones del sistema, Flash Player, WhatsApp y aplicaciones de pornografía.
Una de las principales funcionalidades del malware es comandar decenas de anuncios publicitarios, algunos de los cuales terminan mostrándose a los usuarios finales. Una vez instalada en el sistema, la aplicación se ocultará en el icono del menú de aplicaciones para pasar desapercibida y contactará al servidor que enviará los parámetros de configuración, iniciando un proceso que compartirá anuncios en segundo plano.
Las diversas estafas que prometen iPhones gratuitos, falsas alertas de malware en el equipo que redireccionan a aplicaciones potencialmente peligrosas, sitios de pornografía y apuestas deportivas, son algunos de los anuncios que usan para afectar al equipo. Además de la molestia que ocasionará al usuario la incesante cantidad de ventanas que se abrirán en su dispositivo móvil, el consumo de red podría aumentar los costos por telefonía y reducir marcadamente la utilidad de la batería.
Imágenes: cedidas por ESET. En ellas se muestran ejemplos de ingeniería social que evidencian los mecanismos a través de los cuales se acercan a los usuarios
Este troyano además tiene la capacidad de propagar otros códigos maliciosos que descarga e instala en el smartphone. Entre ellos, una aplicación que dice ser capaz de medir el pulso cardíaco mediante el uso de la linterna del equipo, mientras posee una arquitectura dedicada a mostrar publicidades.
“Afortunadamente, ninguna de estas aplicaciones impide al usuario desinstalar el ejecutable, por lo que, una vez identificadas en el equipo, es posible removerlas mediante las opciones de configuración del sistema. La forma más sencilla de lidiar con códigos maliciosos es bloquear su propagación. Esto puede hacerse de la mano de una solución de seguridad que detecte y bloquee cualquier petición a sitios de dudosa reputación, como aquellos encargados de propagar este troyano”, mencionó Denise Giusto Bilic, especialista en seguridad informática de ESET Latinoamérica.
Al analizar las detecciones del downloader en la región durante 2017, se encontró que el ranking de los países con mayor cantidad de detecciones está liderado por México (24%), Guatemala (14%), Brasil (9%), Colombia (8%) y Bolivia (7%). Desde mediados de XI/2017, diversos países centroamericanos, junto con Bolivia, fueron algunos de los más impactados en Latinoamérica. De hecho, si consideramos qué tanto representan las detecciones de este troyano sobre el total de detecciones de malware en cada país, los cinco países más afectados son Guatemala, Trinidad y Tobago, Bolivia, Nicaragua y Honduras.
“Para evitar estos riesgos, la educación y la concientización son un factor vital en la identificación de campañas de ingeniería social y los riesgos asociados a la instalación de apps poco confiables. También es importante contar con una solución de seguridad móvil capaz de analizar los ejecutables descargados en el terminal y eliminarlos rápidamente si se detecta que son maliciosos”, concluyó la especialista.