El futuro de la investigación de mercados en México

Por: Iván Castro Rivadeneyra. Director de PQR Planning Quant

La investigación de mercados en México ha sido una industria que ha ganado terreno en los últimos años. Sin embargo, enfrenta grandes retos en varios rubros. Entre ellos: adaptación tecnológica, evolucionar en el entendimiento de las necesidades de los clientes y la ampliación de su rango de experiencia.

Iván Castro

De acuerdo con los datos de la AMAI (Asociación Mexicana de Agencias de Investigación) en México, para el 2018, el valor de la industria de investigación de mercados y opinión pública fue de más de 7,300 millones de pesos. Para el año 2019 los pronósticos en cuanto a crecimiento no son tan optimistas. Lo anterior, debido a un ambiente de incertidumbre por el cambio de gobierno, aunado a cambios inminentes por los que atraviesa la industria.

A manera de resumen, identificamos tres aspectos en lo que agencias dedicadas a esta actividad, deberán trabajar en el futuro para asegurar su permanencia en el mercado.

En primer lugar, la tecnología. El alcance de la constante incorporación de tecnología en la investigación de mercados es muy diversa. Por ejemplo, el uso de dispositivos electrónicos para recabar información de las personas, ha permitido asegurar la calidad de la información a niveles insospechados, ya que permite la grabación en su totalidad de las entrevistas, además de la geolocalización de los entrevistadores. En este mismo sentido, los levantamientos online han demostrado, bajo diferentes escenarios, ser la mejor alternativa para hacerse de la opinión de las personas, sin mencionar las ventajas reales en costos de producción. Finalmente, la tecnología también ha impactado a la manera en que los consumidores expresan (en ocasiones sin decidirlo) sus percepciones y preferencias sobre diversos aspectos de la vida cotidiana que le interesan a gobiernos y marcas. De esta manera han surgido alternativas a la manera en la que recolectamos información, en específico, nos referimos a la investigación pasiva que rastrea en el mundo digital, conversaciones en redes sociales, visitas de páginas, consumo de contenidos, etc.

Un segundo aspecto muy relevante entre agencias y clientes es, el entendimiento del contexto de negocio que motiva la contratación de investigación. Cada vez más, las empresas que compran servicios de investigación de mercados exigen el involucramiento total de la agencia en aspectos que impactan, no tan solo a los consumidores, si no también, sus efectos en la competencia, relaciones internas, legislación, comunidad, temas ambientales, gobierno, entre otros.

Por último, el menú de opciones que las agencias de investigación ofrecen a sus clientes, tendrá que caminar en terrenos que tradicionalmente no se tocaban. Por ejemplo, son más las agencias que se han especializado en el tratamiento, explotación y análisis de bases de datos provenientes de fuentes secundarias, como, por ejemplo, estudios públicos o consolidados de información interna de las empresas.

Como toda industria, la investigación de mercados es cambiante y tendrá que adaptarse a las nuevas circunstancias o morir.