Día de la Cerveza: 7 formas de tomarla y encajar en la cultura de cualquier lugar
Las hay ligeras y frutales, pero también espesas y chocolatosas; aunque existen dos tipos principales, lager y ale, y se cree que existen más de 100 variedades alrededor del mundo. Hablamos de la chela en México y Perú; birra, en Argentina, o pola, en Colombia, algo que podemos compartir con personas paisanas o extranjeras, sin importar el momento o el lugar, por eso el 4 de agosto se celebra el Día Internacional de la Cerveza.
Con tantas opciones para todos los gustos, la cerveza, que resulta de fermentar cereales en agua con levadura y después aromatizar con lúpulo, es la bebida con alcohol más popular en el mundo; tan solo en 2022 se consumieron 168 mil 500 millones de litros globalmente y su existencia se puede rastrear hasta la Edad Media.
Aunque su exceso es nocivo, se trata de una bebida que traspasa barreras, simplemente porque es imposible declinar una invitación a disfrutar de una, sobre todo cuando queremos conocer a otras personas que nos acercan a otras culturas e idiomas. Por ello, Duolingo comparte cómo disfrutan de la cerveza en otras partes del mundo.
¡Que parezca capuchino, por favor!
En varios sitios de Europa, como Bélgica, la cerveza no puede servirse sin su respectiva cabeza de espuma. En Alemania igual se rigen por esta regla, sobre todo durante el Oktoberfest, un festival internacional de cerveza celebrado cada año en Múnich. Si bien hay estilos de cerveza que no requieren de una cubierta espumosa, como la Witbier de la cervecería Hoegaarden, la mayoría de ales y lagers sí deben tenerla, así que no te quejes si te llega una cerveza estilo capuchino.
En vaso, pero no en cualquiera
Los tarros y los vasos de cerveza, que suelen tener como medida una pinta, es decir, cerca de medio litro, son los recipientes más comunes para servirla, pero para los belgas, cada estilo de cerveza requiere del vaso apropiado. De hecho, podrían negarse a servirla si no cuentan con el vaso adecuado. Lo mismo sucede en Colonia, ciudad alemana en la que la cerveza Kolsch solo se toma en un vaso con forma de tubo llamado Stange.
Solo para saciar la sed
En Asia Oriental, los diferentes estilos de cerveza no existían y por mucho tiempo, la cerveza en China y Japón era tomada para calmar la sed solamente. En el último siglo, esto ha cambiado y el fermentado se ha convertido en una bebida muy popular, tanto que Snow, de la compañía China Resources Enterprise, es una de las cervezas más vendidas en todo el mundo.
Cervezas regionales y de temporada
En algunos lugares, pero en particular en Europa, algunas cervezas están destinadas a consumirse únicamente en el lugar donde se producen o en una temporada específica. Por ejemplo, en la costa de Bélgica se suele tomar Flemish Red con una orden de camarones, pero esto sería inconcebible en el otro extremo del país. Por otro lado, la temporada es igual de importante como la región para las cervezas, así, las cervezas veraniegas suelen ser frutales y de trigo, mientras que las ideales para el invierno frío son oscuras, estilo stout, porter o trapenses.
Cantidades adecuadas
En lugares como Hungría, Bulgaria o Serbia, la cerveza se sirve en cantidades grandes, mucho más grande que una caguama, pues de acuerdo con Marc Stroobandt, un sommelier cervecero de Bornem, Bélgica, vienen en botellas de dos litros y no son para compartir, sin embargo, esa botella individual será el trago que baste para toda la noche. En América, a diferencia, solemos tomarla en un volumen más pequeño y por lo general, las presentaciones contienen alrededor de 355 mililitros.
Brindar sin chocar los vasos
Un brindis, con cerveza u otra bebida, suele involucrar palabras como salud, en español; prost, en alemán; sláinte en escocés, o kanpai en japonés, seguido de un choque de copas, pero hacer esto estaría fuera de lugar en Hungría, país europeo donde, según la leyenda, se dejó de hacer como protesta a la ocupación de Austria. A unos cuantos países a la izquierda en el mapa, en Bélgica, hay algunas regiones donde lo común —y más divertido— es poner el vaso en la cara de tu acompañante para brindar, según Stroobandt.
Para mejorar la pronunciación
De acuerdo con un pequeño estudio de la Universidad de Maastricht, en Países Bajos, beber una dosis baja de alcohol (alrededor de 460 ml, de una cerveza con 5% de alcohol) permitió que los participantes pronunciaran mejor un segundo idioma, comparados con aquellos que solo habían tomado agua. Esto puede suceder porque el alcohol ayuda a reducir la ansiedad social, sin embargo, el ejercicio estuvo limitado y el mensaje de la investigación no estaba destinado a promover que el alcohol mejora el rendimiento en otro idioma, de hecho, las personas que la realizaron confirmaron que siempre es mejor estudiar, salir y practicar con lugareños en un bar, con cerveza o sin ella.
La aplicación de aprendizaje de idiomas Duolingo compartió contigo estos datos para que pronto estés en Alemania diciéndole a alguien Ich lade dich auf ein Bier ein (Te invito una cerveza).