Alimentos procesados: ¿tan malos como los pintan?
Existe la creencia de que los alimentos procesados son dañinos para la salud, sin embargo el procesamiento de alimentos no es algo nuevo. Los humanos hemos realizado técnicas de conservación y procesamiento desde hace años: fermentación, secado y salado, son algunas de las técnicas.
“La humanidad ha tenido contacto con los alimentos procesados desde tiempos remotos y hoy en día –con los avances científicos– estas técnicas han evolucionado con el objetivo de asegurar un suministro de alimentos suficiente y seguro para la creciente población mundial y el estilo de vida que llevamos en las ciudades”, mencionó Ruth Pedroza, coordinadora del Grupo Académico Hablemos Claro.
Debido a la organización actual de las ciudades, la migración de las poblaciones rurales y la globalización, los sistemas de producción de alimentos deben enfrentar nuevos retos. “A pesar de los grandes avances, el hambre sigue siendo un desafío cotidiano para 815 millones de personas en el mundo, el equivalente al 11 por ciento de la población mundial, por lo que se requiere de alimentos más baratos, nutritivos y de fácil conservación y traslado”, aseguró la académica.
En cuanto a los nutrimentos y beneficios de los alimentos procesados en la dieta, la doctora Pedroza explicó que actualmente hay alimentos enriquecidos o fortificados con vitaminas y minerales que evitan que los consumidores tengan deficiencias nutrimentales. “Las frutas procesadas –es decir aquellas que se encuentran congeladas, enlatadas o deshidratadas en el supermercado– aportan fibra y vitaminas, no hay por qué tener miedo en consumirlas, con la ventaja de que están disponibles para el consumidor durante todo el año”, aseguró.
“Es importante acudir con un especialista que nos ayude a diseñar un plan alimenticio acorde a nuestras necesidades nutricionales y, sobre todo, no temerles a los alimentos procesados e infomarse: todo con el objetivo de que los consumidores puedan tomar mejores decisiones”, finalizó.