Tips de sobrevivencia cotidiana

Por Biviana Chávez, CEO de Mujeres líderes que inspiran

La capacidad de sobreponerse a momentos críticos debe ser el punto de partida para emprender soluciones en el trabajo y en la vida. Sin embargo, tras una crisis existe un momento de frofunda incertidumbre y confusión que nos impide actuar.

 

Profunda

A lo largo de muchos años de ayudar a mujeres que enfrentan la violencia doméstica, detectamos patrones y hemos generado un programa muy simple de resiliencia que puede emplearse en el trabajo y en la vida. El proceso consta de estos elementos:

  1. Es importante clarificar los sentimientos. Es decir,  ser capaz de reconocer lo que realmente estás sintiendo. Acercarse a las emociones que pueden ser de ira, dolor o incompetencia frente a obstáculos crecientes.
  2. Luego, alejar el zoom o centro en una misma para averiguar cómo se sienten otras personas afectadas, pueden ser en otras partes de la comunidad o de la propia organización laboral, e incluso en la sociedad en general. Este es un proceso importante: "Tienes que ser capaz de acercar y alejar para obtener perspectiva, crucial en tiempos difíciles”. Otra estrategia es mucho más simple e interna: practicar respirar lenta y profundamente en momentos de estrés. Esto calma y abre tu campo de visión.
  3. Alejarse de las emociones negativas e ir por las positivas a través de actividades diversas que van desde dormir lo suficiente, comer, hacer ejercicio, conectar con amigos y familiares, salir y aprender algo nuevo.
  4. "No fijarse metas imposibles". Conviene establecer un programa de logros cuantificables y medibles que permitan superar los problemas. En un duelo, por ejemplo, el programa puede incluir: levantarse de la cama a tal hora, bañarse, peinarse, vestir ropa limpia y cómoda, ingerir agua, etcétera. Entre más pormenorizadas estén las tareas mayores resultados se obtendrán. Esto, reitero, se puede emplear para la vida cotidiana pero también resulta útil en las empresas. Por ejemplo, no plantear la digitalización inmediata de una unidad de trabajo sin analizar antes en qué puede ayudarnos o no la tecnología artificial en un proceso determinado de trabajo.
  5. Imaginar el futuro. Si lo puedes imaginar lo puedes lograr, porque ya predeterminaste las acciones que podrás generar paulatinamente para conseguir el gran propósito. Las metas se componen de objetivos simples.

En cualquier situación de crisis existen dos procesos fundamentales: la introspección que nos permite evaluar el daño y empatizar con la claridad que conlleva reconocer los propios sentimientos, y la capacidad para externalizar el problema y buscar ayuda.

En el ámbito personal es descubrir lo que nos daña y el impacto que tiene en cada una de las áreas de nuestra vida y, con esta base, determinar quiénes y cómo nos pueden ayudar a superar. En el trabajo ocurre algo similar: la evaluación de daños debe clarificarse y cuantificarse para planear un proceso emergente de recuperación.

La resiliencia es nuestra capacidad de sobreponernos y marcar nuevas rutas de logros.